Recopilado por Ritchie Pugliese
El Espíritu Santo hablándonos específicamente a nuestras vidas a través de los montes de la Biblia
Desde el Jardín del Edén hasta el Monte de los Olivos hay una cadena de montes donde sucedieron hechos muy significativos. En cada uno de ellos se produjo un acontecimiento sobrenatural y han sido registrados en las Sagradas Escrituras para que nosotros hoy podamos obtener algunas lecciones que revolucionen nuestra vida espiritual y nos ayuden a alcanzar nuevas alturas en Dios.
Miqueas 4:1 dice “Acontecerá en los postreros tiempos que el monte de la casa de Jehová será establecido por cabecera de montes, y más alto que los collados, y correrán a él los pueblos”. Sin lugar a dudas es en los lugares altos donde Dios se revela a su pueblo con poder, es en sus alturas espirituales donde podemos alcanzar mayor estatura espiritual. Por cierto no es necesario hoy que nos vayamos a un monte geográfico para recibir más de Señor, pero si podemos escalar los montes espirituales por fe para tener experiencias cumbres con Dios.
Veamos a continuación aquellos acontecimientos que sucedieron en diversos montes y la aplicación práctica que podemos obtener hoy para beneficio de nuestras vidas y ministerios:
I. EN LA CREACIÓN
La Palabra de Dios nos dice que el Jardín del Edén estaba situado en un monte (Ezequiel 28:13-14). Este lugar es comúnmente conocido como el lugar de todos los comienzos donde el Señor puso a Adán y Eva para que lo labrasen y cuidasen. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LOS COMIENZOS, un lugar adonde Dios nos lleva para hacer algo nuevo. Cuando hablamos de algo nuevo nos referimos a entrar quizás en una nueva etapa económica, física, emocional, ministerial totalmente diferente a lo vivido anteriormente. Cuando subimos al monte a buscar a Dios, con una actitud de expectante paciencia, siempre se generará un génesis o comienzo espiritual.
Lamentablemente a veces por el apuro o las presiones tomamos decisiones fuera del favor de Dios y generamos un “éxodo” en vez de un “génesis”. En el reino de Dios una cosa es un “génesis” y otra muy distinta es un “éxodo”.
Muchos pretenden empezar nuevas etapas en Dios con un “éxodo”, escapando de ciertas situaciones o lugares forzando los tiempos y pretendiendo entrar en otra etapa de la vida pensando que Dios los ha dirigido, cuando en realidad las cosas nuevas de Dios son algo sobrenatural originado y gestado por el Señor. Si en este tiempo está necesitado de algo nuevo de parte de Dios, haga un alto, suba al monte a buscar su rostro y permítale a Él hacer lo imposible.
II. NOE
Fue en el MONTE ARARAT donde Dios restableció su pacto con Noé (Génesis 8:4; 9:1,9) luego que la tierra fuese destruida con el diluvio debido al pecado de la humanidad. Allí fue donde se firmó el pacto de la segunda oportunidad para el ser humano. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA SEGUNDA OPORTUNIDAD.
Nuestros pecados siempre frenan e impiden el obrar de Dios y nos hacen caer de nuestra posición espiritual. Gracias a Dios que por medio del arrepentimiento y la confesión podemos recibir el perdón de todos nuestros pecados (1 Juan 1:9) y empezar otra vez a caminar cerca del Señor. Con Cristo siempre existe una nueva oportunidad. Es muy probable que debido a nuestro pecado los hombres nos desechen, pero aquel que viene humillado ante el Señor es restaurado y levantado a una segunda oportunidad. Alguien dijo una vez que “el ejército de Dios es el único que fusila a los heridos y caídos”. Dios siempre se deleita en restaurar, reponer y levantar lo que está destruido, abatido y caído y esa misma actitud la que debe reinar en la iglesia. No importa cuán bajo usted haya caído, sino que lo que importa más es como usted se ha levantado en Cristo, ¡Que misericordia encontramos en el monte de la segunda oportunidad con el Señor!
III. ABRAHAM
Fue en el MONTE MORIAH donde Dios le ordenó a Abraham sacrificar a su único hijo Isaac. Fue una prueba dura y terrible para este padre que tuvo que esperar muchos años para recibir a este hijo prometido. Dios probó su capacidad de obediencia y fidelidad y resultó aprobado al hacer todo lo que Dios le había ordenado. Abraham tuvo que aprender a renunciar por obediencia a Dios. Cuando eso sucedió el Señor se le reveló como el proveedor (Génesis 22:14). Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA RENUNCIA.
En las profundidades del Espíritu solo avanzan aquellos que han estado dispuestos a renunciar a todo (inclusive lo bueno) por la causa del Señor. La renuncia es una decisión del corazón de poner por sobre todas las cosas al Señor y luego todo lo demás. El grado de renuncia en nuestra vida es la medida de nuestra madurez espiritual. No existe verdadero crecimiento espiritual sin una vida de renuncia.
IV. ELIAS
Fue en el MONTE CARMELO donde Elías desafió a los profetas de Baal (1 Reyes 18:20) y el poder de Dios consumió el holocausto demostrando su poder y autoridad sobre los ídolos. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA VICTORIA SOBRENATURAL.
Existen oportunidades en la vida que debemos ganar guerras conquistando la tierra que Dios nos dio paso a paso, pero existen otras veces donde no podemos hacer nada a menos que Dios intervenga directamente desde el cielo. En esos momentos Dios solo quiere que seamos los espectadores del despliegue de su poder. Nuestra responsabilidad en estos casos es estar “quietos espiritualmente” manteniendo nuestra vida llena de alabanza y santa expectación tal como sucedió con la toma de Jericó (Josué 6) y la Victoria sobre Moab y Amón (2 Crónicas 20:17-22).
V. MOISÉS
Este hombre de Dios fue uno de los que más experiencias espirituales tuvo sobre los montes:
1) EXODO 3:1-6, 12 MONTE HOREB, MONTE DE DIOS
Existe un monte en el cual Dios nos llama para algo más. Moisés tenía 80 años y fue llamado por Dios para hacer algo para El. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DEL COMPROMISO O LLAMADO DIVINO.
Este llamado viene con una visión. Moisés fue cautivado por la visión de la zarza ardiendo que no se consumía. Cuando Dios llama nos pone una visión en la vista espiritual incomprensible a la vista. Dios siempre llama la atención del hombre con una visión. Por Ej.: Isaías cuando vio al Señor sentado sobre un trono (Isaías 6:1-5); Saulo en el camino a Damasco (Hechos 9).
El llamado de Dios siempre nos dirá que hacer, es con un propósito. Moisés tenía que libertar al pueblo de la esclavitud y Dios prometió estar con Él a pesar de todas sus dudas (Éxodo 3:11-4:17). Dios le dio una vara y se la hizo tirar al suelo, la cual se transformó en una serpiente. Luego se la hizo tomar otra vez y esa vara insignificante se transformó en LA VARA DE DIOS. YA NO ERA MAS LA VARA DE MOISES (Éxodo 4:20) Luego le dijo que metiera la mano en su seno y le salió toda llena de lepra, figura del pecado en el corazón del hombre. Le dijo que la volviese a meter y su mano quedo limpia (Éxodo 4:6-7). Dios le enseño a Moisés que Él es el único que puede hacer el milagro de limpiarnos de la lepra y tratar con la lepra para que vivamos una vida limpia. Es necesario tener un corazón limpio. Esto es un milagro, porque solo Dios puede hacerlo con su Poder.
Nuestro llamado o compromiso es un llamado principalmente a una vida de pureza y santidad. El carácter de Cristo o fruto del Espíritu Santo en nuestras vidas, sumado a los dones o servicio siempre glorifican al Señor. Dones y servicio sin carácter o fruto no tiene peso espiritual a los ojos de Dios.
2) EXODO 4:27. Moisés se encontró luego de muchos años con Aarón en el MONTE DE DIOS.
Allí fue donde le besó en señal de afecto y hermandad. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DEL COMPAÑERO. Los que servimos a Dios necesitamos compañeros fieles para hacer la obra. Moisés lo necesito para enfrentarse al Faraón. También fue sostenido por sus compañeros fieles en la cumbre del collado para que pudiese interceder a fin de que el pueblo de Dios ganase la batalla (Éxodo 17:8-16). Necesito del sabio consejo de su suegro para delegar autoridad (Éxodo 18:5-27).
En la Biblia existen muchas personas que trabajaron juntas: ELISEO-ELIAS; TIMOTEO-PABLO; JUAN MARCOS-PABLO; BERNABÉ-PABLO. A esta clase de gente llena del Espíritu Santo la encontraremos únicamente en el monte, en las Alturas del Espíritu. Tenga cuidado quienes son sus compañeros íntimos. David tuvo un compañero malo llamado Joab y tuvo que lamentarse (2 Samuel 18) ¿Son sus amigos en verdad cristianos llenos del Espíritu Santo? ¿Ellos defienden por sobre todo la pureza y santidad de Dios?
Esta clase bendita de compañerismo espiritual cuando se da, se produce un afecto más allá de lo natural, es una clase especial de amor celestial. ¡Pidámosle al Señor compañeros según Su corazón pues los necesitamos para que nos alienten y apoyen!
3) EXODO Caps. 19-24 En el MONTE SINAI se realizó un encuentro entre Jehová Dios y Moisés. Estuvieron juntos durante 40 noches y 40 días. El pueblo tenía prohibido subir al monte ni tocarlo. Moisés allí recibió las tablas de la Ley, instrucciones para la construcción del Tabernáculo, directivas para el sacerdocio y los estatutos para el pueblo. La Biblia dice que Moisés hizo todo conforme al modelo que Dios le dio (Éxodo 40:19, 21, 23, 25, 27, 29). Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA FRESCA REVELACION.
Debemos apartarnos muchas veces para que Dios nos hable específicamente. El activismo es el enemigo #1 del ministerio. Debemos recibir primero palabra de lo alto para dar palabra al pueblo.
Cuidado con recibir revelación de otros y no la personal que viene como resultado de nuestra intimidad con Dios. La lectura de libros, videos, casetes, seminarios tiene su lugar pero no debemos depender de estos para recibir algo directo de Dios sin revelación de Dios no tendremos una palabra rema (es decir, una palabra especial para una persona especial en un momento especial) para compartir a los demás.
4) MONTE DE HOR (NÚMEROS 20:22-29)
Aquí Aarón muere y es reemplazado por su hijo Eleazar. Si miramos el trasfondo de este acontecimiento nos daremos cuenta que hasta este momento el pueblo había andado por el desierto en círculos, pero de aquí en adelante no andarían más en círculos sino marchando directo hacia la tierra prometida. Es por eso que Dios debía renovar el sacerdocio por lo cual Aarón fue desnudado de sus ropas. Ya el antiguo sacerdocio no serviría más y era necesario alguien nuevo. Este proceso involucra muerte. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE RENOVACIÓN.
Todo proceso de renovación, para avanzar un paso adelante en Dios, implica la muerte de algunas o todas las cosas que hemos venido haciendo o viviendo. La Palabra de Dios nos dice en Juan 12:24 que “si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto”. A medida que Dios nos lleva a un nuevo nivel algo tendrá que morir del nivel anterior. Todo proceso de renovación implica: Crisis, dolor, negación, renuncia, luchas, ataques, etc. Así como del monte subieron tres y volvieron dos, de esa manera Dios quiere trabajar en nuestra vida.
Cuando Dios llamó a Abraham de Ur de los Caldeos (Génesis 11:28) para algo más algo semejante sucedió. En Param murió Taré (Gen. 11:32). Luego Dios separa a Abraham de su tierra y familia (Gén. 12:1) y lo lleva a algo desconocido. Todo esto es un proceso de sucesivas “muertes” sea geográfica, física o emocional. Más adelante se separa de su sobrino Lot (Gén. 13:14) e inmediatamente Dios le da una nueva visión. Posteriormente se separa de su sierva Agar y su hijo Ismael (Gén. 21:9-13). La prueba del sacrificio de Isaac vendría después (Gén. 22) y finalmente muere su esposa Sara (Gén. 23:1-2). El deseo de Dios es que dejemos todo lo que nos costó la vida en el monte y bajemos renovados porque una etapa termino y empieza otra. ¿Qué quieres de mí, Señor?
5) MONTE ABARIM: (DEUT. 32:49)
Dios le mostró la tierra prometida a Moisés antes de morir y le habló de su reemplazante, Josué. Moisés con lágrimas aceptó la decisión del Señor de ver la tierra desde lejos y no poder entrar con el aval de Dios. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA ACEPTACION DE LO QUE DIOS TIENE PARA MI.
David fue ungido rey pero tuvo que vivir en cuevas como un enfermo desechado. El Apóstol Pablo le pidió tres veces al Señor que le quitase el aguijón de su carne (2 Cor. 12:7-10) y el Señor se lo negó. Existe un lugar donde debemos aceptar los designios de Dios.
Existen cosas que suceden en la vida la cual no las entendemos: Un impedimento, un tiempo prolongado de pruebas, una enfermedad, ver que otros prosperen en su economía, el ministerio y nosotros no a pesar de ser fieles en todo, aceptar la familia que tenemos, nuestras limitaciones, etc. La Biblia nos dice que Jesús fue varón de dolores y experimentado en quebrantos y (Isaías 53:3; Hebreos 5:8). Es en ese monte donde debemos decirle al Señor:- No lo entiendo pero lo acepto Señor -.
6) MONTE EBAL/ MONTE GERIZIM (DEUT. 27-28; JOSUE 8:30-35))
El Monte Ebal era el lugar donde se debían promulgar las maldiciones; y el Monte Gerizim era el lugar donde se debían pronunciar las bendiciones para el pueblo de Israel.
Las bendiciones tienen que ver con la fidelidad del pueblo hacia Dios y las maldiciones con los pecados del pueblo contra Dios. Para nosotros hoy REPRESENTA UN MONTE PARA BENDECIR Y OTRO MONTE PARA MALDECIR.
Dios puso en nuestros labios el poder de bendecir y maldecir (Proverbios 18:21). Para hacer esto hay que ir al monte, pues sino operaremos en el poder de la carne en vez del Espíritu de Dios. Debemos aprender a bendecir lo que Dios bendice y a maldecir lo que Dios maldice.
La Palabra de Dios nos enseña que fuimos llamados para heredar bendición (1 Pedro 3:9) Fuimos benditos con la bendición de Abraham (Gál. 3:13-14). Los patriarcas acostumbraban a orar pidiendo bendición sobre sus hijos. Abraham bendijo a Isaac, Isaac bendijo a Jacob y Jacob bendijo a sus 12 hijos. En 1 Samuel leemos que el sacerdote Eli, quien a pesar de no andar a la altura de la dignidad de su llamado, bendijo a Ana y esta posteriormente tuvo el hijo deseado, Samuel. Luego con Elcana ella tuvo cinco hijos más (1 Samuel 2:20-21). Los que están en autoridad deben ser ministradores de bendición al pueblo de Dios.
Por otro lado vemos que cuando Jacob huyo de Laban, su esposa se trajo los ídolos de su padre sin que él lo supiera (Gén. 31:19). Laban al darse cuenta los persiguió y le pregunto porque le había robado sus dioses (Gén. 31:30). Fue en ese momento que Jacob lanzo una maldición contra aquella persona que hubiese robado sus ídolos sin saber que la culpable había sido su propia esposa (Gén. 31:32). El resultado fue que posteriormente ella murió al dar a luz (Gén. 35:16-19).
Debemos aprender a vivir bajo bendición cortando en el Nombre de Jesús las maldiciones familiares, de herencia, de impedir el cumplimiento del maravilloso plan que Dios tiene para nuestras vidas, maldiciones de brujos, hechiceros y poner en su lugar las bendiciones de Dios.
7) MONTE NEBO, CUMBRE DE PISGA (DEUT. 34:1).
Este fue el último monte de Moisés. Allí el murió por decreto de Dios. Pudo tomar la tierra por fe, pero no prácticamente. El vio la tierra pero no la disfruto. Moisés dejo un legado, una herencia para la posteridad. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA HERENCIA.
Muchos de nosotros hemos disfrutado lo que otros han padecido. Algunos dejan una herencia bendecida y otros una no tan buena. El profeta Ezequías dejo una herencia mala a sus descendientes. Se dice que John Wesley dejó una herencia poderosa pues sus mensajes todavía hoy siguen vigentes.
Hay cosas que tenemos que hacerlas nosotros para que quede una influencia posterior. ¿Qué legado le estamos dejando a nuestros hijos, a nuestra familia, a nuestra nación? Dios está buscando hombres y mujeres de herencia, que dejen un legado de bendición futura. Con el Señor podemos dejar una huella positiva en este mundo. El Salmo 48:14 dice “Él nos guiará aún más allá de la muerte” ¿Qué epitafio le gustaría que se leyera en su tumba el día que usted muera?
7a) Del punto anterior se desprende otro muy importante.
Moisés murió sin entrar físicamente en la tierra pero si leemos lo que sucedió muchos años después en el monte de la transfiguración veremos que junto al Señor, aparecen Elías y Moisés juntos (Marcos 9:2). Moisés entró por un milagro en la tierra prometida. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DEL CUMPLIMIENTO O EL MONTE DE LAS ORACIONES CONTESTADAS.
El sueño de Moisés de entrar en la tierra prometida se cumplió no en la carne sino lleno de Gloria. Todo lo que le hemos pedido a Dios se ha de cumplir si estamos en el monte con Jesús. Cada petición que le hemos hecho al Señor ha sido agendada y será respondida en su debido tiempo. ¿Tenemos esta clase de certeza al orar?
VI. JESÚS
En la vida de nuestro Señor encontramos también muchos hechos significativos en los montes:
1) EL MONTE DE MATEO 4:8-10
Luego de su bautismo, el Espíritu Santo llevó a Jesús al desierto donde fue severamente tentado por el diablo. La palabra desierto significa “un sitio de peligro de muerte y de poderes diabólicos”. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA TENTACION.
Existen etapas en la vida donde pareciera que somos más atacados y sensibles a las tentaciones. Es en medio de esos momentos que necesitamos recordar que a Jesús le paso primero y el venció con el poder del Espíritu Santo y la autoridad de la Palabra de Dios. Esos son momentos donde debemos movernos con mayor cuidado y refugiarnos en el Señor. La tentación nunca viene de parte de Dios (Stgo 1:13) y si decidimos caminar en fidelidad Él nos dará la salida hacia la victoria (2 Pedro 2:9; 1 Cor. 10:13). El carácter de Cristo se forma en el crisol de la lucha contra la tentación y con nuestra disposición a ser formados más a la imagen del Señor.
2) EL MONTE DE LUCAS 4:5
El proceso de tentación que se llevó a cabo en un monte fue también un tiempo de lucha espiritual entre Satanás y el Señor. Jesús fue llevado específicamente por el Diablo a un monte muy alto para ser ferozmente atacado. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DEL ATAQUE SATÁNICO.
Una cosa es ser atacado con tentaciones y otra diferente es luchar cara a cara contra el enemigo. Existen tiempos donde pareciera que el enemigo se hubiera ensañado con nosotros para aniquilarnos. No es solamente un ataque sino que despliega todo su maléfico arsenal para eliminarnos. Por cierto todo esto está permitido por el Señor para darnos su victoria y promovernos a un nuevo nivel de unción y autoridad espiritual. A mayor unción sobre nuestras vidas, mayor será la lucha espiritual. El enemigo intentara aniquilarnos para que no cumplamos el plan de Dios aquí en la tierra. Existen tiempos donde el ataque se intensifica y es allí donde debemos intensificar nuestra defensa y ataque. Debemos caminar cubiertos con la Sangre de Cristo, vestidos con toda la armadura de Dios (Ef. 6:11-18), llenos del Espíritu Santo (Ef. 6:10) y protegidos por los ángeles (Sal. 34:7), guerreando con la Espada del Espíritu que es la Palabra de Dios.
3) EL MONTE DE JUAN 4:20
El conocido episodio con la mujer samaritana en el pozo de Jacob nos habla de un monte de adoración (Juan 4:21, 23, 24) Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA ADORACION EN ESPIRITU Y EN VERDAD.
Es probable que por mucho tiempo nos hemos conformado con cantarle al Señor pero ahora nuestros ojos espirituales han sido abiertos a la hermosa realidad de que existe algo más profundo llamado adoración donde podemos meternos en la cámara secreta del Rey y tener intimidad con El. No son muchos los cristianos que entran al Lugar Santísimo debido a que desconocen las profundidades de la verdadera adoración. Para llegar a ser un verdadero adorador debemos vivir una vida de santidad (esto significa “adorar en espíritu”) y obediencia a las demandas del Señor (esto significa “adorar en verdad”). La vida cristiana mediocre o carnal no califica espiritualmente para brindarle al Señor una verdadera adoración.
4) EL MONTE DE MARCOS 9:2
Aquí ocurre la transfiguración de Jesús donde aparecen Elías y Moisés (según se cree fue el MONTE HERMON). En un instante Jesús fue cambiado por la Gloria de Dios. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA TRANSFORMACION ESPIRITUAL.
Este monte nos enseña además que necesitamos ser transformados y cambiados por el poder del Espíritu Santo en el monte con Dios. No existe verdadero cristianismo sin cambio de vida y avance espiritual. La palabra “transfiguración” es la misma que aparece en Romanos 12:2 “transformaos” y se la traduce con la palabra griega “metamorfosis”, proceso en el cual un gusano al cabo del tiempo deja de arrastrarse en la tierra y se transforma en una bella mariposa volando por los aires. Esta es una figura de lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas: Ayudarnos a que dejemos de arrastrarnos en el fango del pecado y la carnalidad para poder levantar vuelo como mariposas en las alturas espirituales de la pureza y la santidad.
5) EL MONTE DE LUCAS 6:12
Jesús estuvo en orando toda la noche en un monte para recibir confirmación de Dios acerca de quienes serían los doce apóstoles. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LAS DECISIONES.
Las decisiones apuradas que no están saturadas de oración pueden conducirnos al error y posteriores problemas. Necesitamos aprender a diferenciar los “tiempos y las sazones” (Hechos 1:7), entre el kronos y el kairos de Dios. La palabra griega “kronos” se refiere al tiempo horario/calendario, en cambio “kairos” es la palabra griega utilizada para expresar “el tiempo indicado o preciso de algo”. Por Ej.: Una mujer tiene un embarazo de 9 meses calendario (eso sería el kronos), pero ella sabe que cuando le lleguen las contracciones habrá llegado el tiempo (eso sería el kairos) del alumbramiento. Necesitamos ir al monte de las decisiones para saturar con oración aquellas cosas en las cuales debemos tomar una decisión correcta y en el tiempo del Señor.
6) EL MONTE DE MATEO 5:1
Fue en este monte donde se predicó el conocido “Sermón del Monte” y donde Jesús impartió enseñanzas tan profundas que aun los teólogos hoy no pueden descifrarlas totalmente. Jesús como hijo de Dios cumplió la función de maestro, trayendo a la luz las verdades ocultas del Espíritu. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA REVELACION.
Es en el monte de Dios donde obtenemos luz sobre lo que está escrito en la Palabra de Dios. Alguien dijo con razón que la revelación de los 66 libros de la Biblia ya fue dado, formando el canon, por lo cual hoy debemos pedir al Señor iluminación para interpretar las Sagradas Escrituras. Si estamos en el ministerio necesitamos cada día mayor gracia para enseñar y predicar la Palabra de Dios con la unción del Espíritu Santo. Juan 6:63 dice: “…las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida”. La revelación de la Palabra de Dios viene a nuestras vidas cuando fusionamos la autoridad de las Sagradas Escrituras con el Poder del Espíritu Santo. Allí se forma un verdadero equilibrio y podemos dar pan fresco del cielo a los demás para que sean alimentados, solidificados y fortalecidos a fin de manifestar el carácter de Cristo y hacer bien la obra de Dios (Efesios 4:12).
7) MONTE DE LOS OLIVOS (Lucas 22:39)
Este es el único lugar donde vemos a Jesús gimiendo e intercediendo hasta lo sumo. Él estaba enfrentando una situación extrema, la cual requería un clamor extremo. La medida de ese gemir desesperado en la presencia de Dios fue la medida del fortalecimiento que recibió para cumplir el plan de Dios. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DEL GEMIDO Y CLAMOR DESESPERADO.
El clamor y gemido desesperado se origina al enfrentar situaciones dramáticas y/o desesperadas de la vida. Es un grito que sale de lo profundo de nuestro ser clamando por la ayuda y el favor de Dios. No todos han entendido esta clase de oración profunda y son pocos los que la practican. Existen tiempos en los cuales con las oraciones “comunes” o rutinarias que hacemos no lograremos satisfacer el corazón de Dios ni las puertas se abrirán para que pasemos al otro lado donde está la bendición. Será necesario no solo intensificar el tiempo sino también la calidad espiritual de nuestra oración. Será necesario agonizar clamando y gimiendo pidiendo el obrar del Señor. Es cuestión de vida o muerte y la salida depende de la intensidad del clamor. Cuando alguien que no sabe nadar se ha caído al agua y se está ahogando, grita lo máximo que sus fuerzas lo permiten en busca de ayuda porque sabe que si esta no llega es su fin. Debemos aprender a ejercitarnos en esta clase de oración antes de que las circunstancias adversas nos enseñen a gemir y clamar.
8) MONTE DE LA CALAVERA/GOLGOTA O CALVARIO (Juan 19:17)
El evento más importante de todos los tiempos se llevó a cabo en este monte. Allí Jesús fue crucificado por amor a la humanidad (Juan 3:16) a fin de que por su muerte nosotros pudiéramos hoy tener vida cuando nos convertimos de las tinieblas al reino de la luz (Rom. 5:8). La salvación solo y únicamente podía llegar a la humanidad por medio de la muerte de Cristo y su posterior resurrección. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA MUERTE.
No puede haber vida y bendición sino opera primero la muerte. No es cuestión de quitarse la vida sino la determinación de morir en vida, crucificando nuestra carne, nuestros deseos, nuestros anhelos, nuestros sueños por amor al Señor y su causa. Únicamente los muertos espirituales son los que pueden ministrar la vida del Espíritu de Dios. A mayor muerte, habrá mayor caudal de vida de Dios fluyendo para bendecir a los demás y vivir una vida llena de la Gloria del Señor.
9) MONTE DE LOS OLIVOS (Hechos 1:12)
Cuando Jesús se despidió de sus discípulos antes de ascender a la diestra de Dios, lo hizo en este famoso monte. El ascendió a los cielos y se perdió entre las nubes y aseguro que como se fue volverá a buscar en las nubes a los suyos en el tiempo del arrebatamiento. Para nosotros hoy REPRESENTA EL MONTE DE LA BIENAVENTURADA ESPERANZA.
En la iglesia primitiva se saludaban diciendo “maranatha”, que significa “el Señor viene” y en las epístolas leemos la constante expectativa que tenían del arrebatamiento con Cristo en las nubes. Hoy vivimos sin pensar siquiera en ello, cuando en realidad hoy más que nunca estamos cerca de este poderoso acontecimiento que sucederá en la iglesia de Cristo. ¿Qué pasaría si en nuestras vidas y ministerios viviéramos a cada instante pensando que el Señor puede venir en cualquier momento? Ese pensamiento nos ayudaría a vivir cada segundo en extrema pureza y santidad y veríamos en nuestras vidas, familias, congregaciones y ciudades un verdadero despertar espiritual. ¡Hoy más que ayer necesitamos ir al monte de la bienaventurada esperanza!
Dios nos invita a buscarle en el monte de su presencia
Dios nos llama en este tiempo a que vayamos a buscarle en el monte pues allí experimentaremos tomados de su mano experiencias nuevas, vitales y necesarias para alcanzar una vida saludable espiritual y ser hombres y mujeres de autoridad espiritual. No nos conformemos con menos, ¡Subamos al monte para tener experiencias cumbres en el Señor y nuestras vidas jamás volverán a ser las mismas!