Por Ritchie Pugliese
La Palabra nos dice en 2 Timoteo 3:1 que los postreros días serían tiempos peligrosos, y no hay duda que eso es lo que estamos viviendo actualmente en muchos sentidos.
Como nunca antes se ha manifestado en la sociedad un espíritu anti-Dios, con ideologías completamente ateas que tienen la firme intención de quitar a Dios del sistema de vida para crear una “nueva raza superior”.
Todo lo que estamos viviendo gira en torno a una agenda diabólica creada para impedir que las personas lleguen a los pies de Cristo.
Como Iglesia debemos ser entendidos de los tiempos espirituales que vivimos y debemos actuar de acuerdo a lo que el Espíritu nos va diciendo.
Considero que si bien hoy se necesitan nuevas estrategias para predicar el glorioso Evangelio de Jesucristo, el contenido del mensaje sigue siendo el mismo: Cristo es la única y mejor respuesta para nuestro mundo caído y abatido. Sin el Señor no hay solución posible a los problemas de este mundo.
Por eso, se hace indispensable en estos días la predicación del evangelio para contrarrestar el fuerte espíritu contrario que existe a todo lo relacionado a Dios y traer personas a los pies del Señor.
Dios quiere utilizar a su iglesia en este tiempo con su estrategia eficaz: El ministerio evangelístico.
Según la Palabra, el modelo bíblico de Evangelista lo encontramos reflejado en la vida de Felipe en Hechos 8:5-8 “Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. Y la gente, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo las señales que hacía. Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían estos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; así que había gran gozo en aquella ciudad.”
Es interesante notar que Felipe por un lado “decía” (predicaba la Palabra) y Dios lo respaldaba con señales sobrenaturales (milagros).
Tengo un fuerte sentir en mi espíritu que a esta unción de evangelista, que fluía en la vida de Felipe, Dios para estos tiempos la quiere fusionar con la “unción apologética”, la cual la vemos reflejada en Apolos, en Hechos 18:24 “Llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las Escrituras. Este había sido instruido en el camino del Señor; y siendo de espíritu fervoroso, hablaba y enseñaba diligentemente lo concerniente al Señor”
Según el diccionario de la RAE la apología es un discurso de palabra o por escrito en defensa de algo. Un apologista es aquel que defiende una idea o credo. Es alguien que sabe de lo que habla y lo transmite de manera contundente.
Para que la fusión de estas dos unciones fluya, es necesario saber que el evangelista por un lado necesita depender del Espíritu Santo para todo lo milagroso (ya que él no lo puede producir), pero para todo lo referido a la palabra él tiene que hacer su parte: Necesita capacitarse para tener buenas bases bíblicas, y un entendimiento de los principios del Reino. De esa manera guiado por Dios podrá refutar, contradecir y hacer callar “al enemigo y al vengativo como dice Salmos 8:2.
¡Esta es la clase de evangelista que se necesita en esta hora crucial de la historia!
Dios en este tiempo anhela que se repita lo que sucedió con los discípulos, luego de que fueran comisionados por el Señor Jesús. Leemos en Marcos 16:15-19 “Y (Jesús) les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; más el que no creyere, será condenado. Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; 18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán. Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios. 20 Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén.
¡Que esta sea también la experiencia de nuestra Iglesia hoy!
¿Te sientes llamado al ministerio evangelístico?
¡Esto es lo que necesitas para servir a Dios con las dos unciones mencionadas en el artículo!
Entra en el siguiente enlace para saber de qué se trata:
https://restorationnations.com/bible-coach-certification/