MISTERIOS REVELADOS DEL REINO DE DIOS

Introducción

Mateo 13:10-13

10Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas?11El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; más a ellos no les es dado.12Porque a cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; pero al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado. 13Por eso les hablo por parábolas: porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden.”

“misterios” del griego: μυστήρια (mustérion)= secretos

Jesús les explica a sus discípulos que ellos sabrían los misterios del Reino de Dios, pero que está velado para los que no son parte del Reino de Dios.

vv.16-17 “Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen (los misterios).17Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.”

Jesús les está diciendo: ¡Ustedes son privilegiados porque pueden conocer los misterios o secretos del Reino de los cielos!

Nosotros también hoy por ser hijos de Dios tenemos el privilegio de conocer los misterios o secretos del Reino de los cielos, y de eso vamos a hablar hoy.

Al recibir la revelación de los misterios del reino de los cielos, podremos entender el plan total de Dios para la humanidad.

La revelación de los misterios del reino de Dios

Para comenzar debemos Jesús no vino a fundar una religión mas de las tantas que hay en el mundo. Su mensaje central define su misión, por eso el dijo en Mateo 4:17 “arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado (ha bajado o ha llegado lo que estaba lejano)”. Jesús vino a traer el reino de los cielos a la tierra.

En la Biblia, la palabra griega “metanoia” (μετανοια), que a menudo se traduce como “arrepentimiento” o “conversión”, significa un cambio profundo de mentalidad, un cambio de rumbo en la vida, una nueva forma de ver y entender la vida desde la óptica divina.

Para eso, necesitamos entender primero, cómo opera un reino y en que consiste la mentalidad de un rey.

La definición de “reino” es: “la influencia que tiene un rey sobre un territorio, donde él es el dueño total y absoluto de ese territorio, incluida la gente que allí vive y de todo lo que en ese reino hay.”

En la antigüedad la fama y reputación de un Rey dependía de la cantidad de territorios que dominaba. La mentalidad de un rey es conquistar tierras.

Cuando un rey conquistaba un nuevo territorio, lo llamaba “colonia del reino de…”.  (El diccionario de la RAE define a la palabra “colonia” como “Territorio dominado y administrado por una potencia extranjera”).

Lo primero que hacía el rey conquistador era enviar al nuevo territorio un representante, llamado Gobernador. Él era el encargado de reproducir la cultura del Reino y hacer que las leyes se establecieran en el lugar. Su misión era hacer que todo ese territorio fuera una réplica exacta del reino conquistador. Cualquier visitante podría decir, por ejemplo: – ¡este lugar es igual a Inglaterra, el país conquistador! –

Establecía además en el lugar, el mismo idioma que se hablaba en el reino conquistador. Por ejemplo: en Brasil holy se habla portugués porque fue conquistado por Portugal. En Haití hoy se habla francés porque fue conquistada por Francia. En Jamaica y otras islas del Caribe hoy se habla inglés porque fueron conquistados por Inglaterra. En los lugares donde hoy se habla español, fue porque fueron conquistados por España.

Entonces:

1. Cuando se conquistaba un nuevo territorio se lo llamaba “colonia”.
2. El Rey enviaba a su representante. Su misión era establecer las leyes del reino en el nuevo lugar.
3. Se establecía el idioma oficial del reino conquistador

¡Estas mismas cosas son las que ha hecho Dios sobre la colonia llamada “tierra”!

Veamos cómo fue en el principio

Cuando creó los cielos y la tierra, Dios, el Rey, decidió hizo lo que hace un rey:

1. Al nuevo territorio lo llamaría tierra.
2. Envió a su representante, el Espíritu Santo.
3. Estableció un idioma para comunicarse con el ser humano
4. El ser humano tendría dominio sobre todas las cosas

Esto lo vemos en Génesis 1:2 cuando dice: “Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios (el representante del reino de los cielos) se movía sobre la faz de las aguas.”

Posteriormente vemos que el representante siguió trabajando en la colonia llamada tierra cuando Dios formó al ser humano y sopló sobre el para darle vida: “Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida (Espíritu, en hebreo ruak, viento, para nosotros, el Espíritu Santo, su representante) y fue el hombre un ser viviente.” (Génesis 2:7)

Este representante residiendo en el interior del ser humano le dio poder para dominar y sojuzgar (Génesis 1:28) y obedecer las palabras de Dios.

Estableció un idioma del reino de los cielos para que el hombre hablara libremente con Dios. Por lo que vemos, inicialmente el lenguaje era creativo. Dios creó las cosas con su palabra y luego a Adán se le dio esa autoridad en Génesis 2:19-20 para darle nombre a los animales vivientes.

Haciendo esto, el ser humano viviría experimentando paz, armonía, orden y bendición, con Dios de su lado…

…Todo marchaba bien hasta que algo extraño sucedió…

En Génesis 3 leemos que Adán y Eva desobedecieron a Dios. A los ojos de Dios, ese acto desobediente fue una decisión de renunciar al domino del reino de los cielos para dar lugar a otro reino. Ese comportamiento desobediente fue como si le hubieran dicho a Dios: – No queremos mas ser colonia del Reino de los cielos, tenemos otra opción –

Adán y Eva fueron influenciados por otro reino:  El reino de tinieblas, que como cualquier reino tiene sus propias reglas y estilo de vida. El reino de los cielos emprendió su retirada y entró en vigencia las leyes del reino de tinieblas, donde reinaría la maldición y el ser humano quedaría atrapado condenado a vivir en la pobreza, el tormento, la infelicidad, la maldición en todos los aspectos.

Manifestaciones del reino de tinieblas

1) El asesinato de Abel en manos de Cain (Génesis 4:8). Esa era la cultura del reino de tinieblas: hurtar, matar y destruir (Juan 10:10). Es por eso que vemos hoy el avance de las drogas, la inmundicia, familias destruidas, las pandillas, robos, hurtos, prostitución entre tantas otras cosas perversas.

2. La confusión del lenguaje en el evento de la torre de Babel (Génesis 11) Ya no habría un único lenguaje, ya que se mezclaron las lenguas.
3. El ser humano perdió el dominio y pasó a ser dominado por las tinieblas.

Todo parecía perdido, pero Dios, el Rey sobre todos los reyes, no se dio por vencido

Trazó una nueva estrategia de reconquista de la tierra para que volviera a ser una colonia del reino de los cielos. Su glorioso plan seria enviar a la tierra a Jesucristo.

El ministerio terrenal de Jesucristo

Es interesante destacar que Jesús no habló de establecer una democracia, crear una república o instalar un sistema socialista, Tampoco habló de fundar una nueva religión sino instaurar un reino. El afirmó en Mateo 4:17 “Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado (a la tierra).”

Jesús anuncia su llegada hablando del reino de los cielos y que ese reino ahora se ha acercado a la tierra.

Jesús durante su ministerio terrenal transmitió los conceptos para traer el Reino de los cielos a la tierra como había sucedido en el principio de la creación.

1. El Señor le enseño a sus discípulos que enviaría su representante para traer un cambio e implementar la política (estilo de vida) del Reino en la tierra: El Espíritu Santo.

En Juan 16: 7 leemos: “Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador (el Espíritu Santo, representante del Reino de los cielos) no vendría a vosotros; más si me fuere, os lo enviaré.”

Eso se cumplió en Juan 20:22: “Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu” Santo.” Y posteriormente al derramar sobre los 120 el Espíritu Santo el día de Pentecostés.

1. Este representante les daría poder de autoridad y dominio (Hechos 1:8 “recibiréis poder”)
2. Establecería un nuevo lenguaje, hablar en nuevas lenguas

Jesús les dijo a sus discípulos en Marcos 16:17 y les otorgó dos cosas: “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;”

Hechos 1:3 dice que cuando Jesús se presentó vivo les estuvo hablando del Reino de Dios.

Por eso sucedió lo de Hechos 2: Se derramó el Espíritu Santo, le otorgó poder y dominio a los suyos y estableció un nuevo lenguaje, lo que conocemos como hablar en lenguas.

¿Entendemos ahora porque en los evangelios leemos que Jesús no predicaba el Evangelio, sino el evangelio del Reino de los cielos?

Mateo 4:23 Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.

Mateo 9:35 Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.

¿Entendemos por qué Jesús dijo esto en los siguientes pasajes?

Mateo 24:14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

En Mateo 6:10: “Venga tu reino (Reino de los cielos). Hágase tu voluntad, como en el cielo (Reino de los cielos), así también en la tierra (colonia del reino).

Y en Mateo 6:33 “Mas buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia”.

¿Qué significa “primeramente”? = Que sea la prioridad de la vida.

“Buscad” = Es mi responsabilidad, no la de Dios. Es un mandato divino, buscar el Reino diligentemente

Significado de buscar:

1. Perseguir
2. Explorar
3. Entender
4. Estudiar
5. Aprender
6. Considerar, meditar sobre el reino

¿Entendemos porque la Iglesia primitiva predicó y manifestó el Reino de los cielos?

(Hechos 8:12) Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.

La respuesta es muy clara y precisa:

Si no seguimos el patrón dado por Dios para establecer el Reino de los cielos en la tierra, no estaremos edificando el Reino de los cielos, porque el Reino de los cielos se edifica como Dios lo diseñó y transmitió.

A esto hemos sido llamados y comisionados a los efectos de ver desplegada el poder y la gloria de Dios…

¿Estamos edificando el Reino de los cielos o nuestro propio reino?

¿Somos buscadores de nuestro propio reino o el de Dios?