COMISIONADOS CON EL EVANGELIO

Por Marcos Leonel Fures (*)

“Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16.15)

Jesús inmediatamente después de haber resucitado, se les apareció a sus discípulos y los envió en representación de él, como embajadores, para que hicieran lo que él hizo cuando ejerció su ministerio en la tierra. Es decir, sus discípulos recibirían este mandato para que el reino de Dios siguiera extendiéndose a todas las naciones de la tierra. Este mandato es para nosotros hoy, pues también somos sus discípulos.

Ahora quiero mostrarles lo que Jesús habló en esta ocasión.

Lo primero que les dijo fue: “Id”. Note usted que no está en acción pasada, ni tampoco en acción futura sino que la podemos ver en este contexto, en acción presente. Jesús se encargó de dejar bien sentado que la proclamación de su mensaje seria anunciado en todo tiempo, en toda época y por todas las generaciones. Debemos decir, que si nos ha llegado el mensaje del evangelio, es por la fidelidad y obediencia de hombres y mujeres que entendieron esto de ir y se lanzaron a las naciones.

Etimológicamente la palabra “Id”, tiene su significado amplio del griego “poreúomai” que quiere decir: “atravesar, viajar, andar, apartar, camino, ir, salir, seguir”. Cuando Jesús dijo que vayamos a predicar nos dijo que lo hagamos a todas las naciones, es decir, en todas partes.

Fuimos apartados por Dios con una misión y no debemos detenernos, debemos salir a anunciar el mensaje de salvación que transforma lo natural. Debemos seguir hasta cubrir toda la tierra con el mensaje del Reino de Dios.

Enviados con poder de lo Alto

Los discípulos entendieron que el mandato de Jesús los revestía de autoridad, pues estaban siendo enviados por él…. “Y ellos saliendo predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían” Marcos 16.20. Cuando predicas el evangelio no lo estás haciendo en tu autoridad, pues tienes la autoridad de Aquél que te envió.

En una oportunidad el Señor habló a mi vida de una manera tan clara, que pude entenderlo. Ante muchas preguntas, o mejor dicho excusas ante el llamado de Dios; estas hacían que descalificara la autoridad que él había puesto sobre mi vida para anunciar su palabra. Él me dijo: – Marcos ¿Qué es lo que te da la autoridad, para predicar mi palabra? ¿Qué te habilita? ¿Te lo da un título teológico? ¿Te lo da un título universitario? Todo esto te añadirá conocimiento, y es importante, pero la autoridad te la doy Yo, Yo te habilito para que camines en mis obras. –

Creo con todo mi corazón que debemos ser una generación que esté íntegramente preparada para ser de testimonio, a un mundo que necesita a Cristo. Los estudios y carreras universitarias nos harán ocupar lugares de influencia para que el Reino de Dios sea establecido allí, pero debemos recordar que la autoridad viene de parte de Dios para hacer su obra.

Basta de excusas, acepta que eres llamado por Dios y que él quiere manifestar su voluntad en tu vida, para que transites por el propósito con el cual fuiste creado. Cuando puedes entender que eres enviado por Dios, será tan simple que podrás ver que las señales te acompañarán: Milagros, liberación de endemoniados, sanidades, etc. Porque cuando eres enviado, hay una unción sobre tu vida que es la autoridad de la presencia de Jesús, por medio del Espíritu Santo.

Marcos 16.20

“Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén.”

Hechos 1.8

“pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”

(*) Marcos Leonel Fures es un joven evangelista de Argentina, quién con su visión fresca nos anima a proclamar el evangelio dondequiera que vayamos.  Reside en Neuquén con su esposa y es parte del Cuerpo Ministerial de la Iglesia “Fuente de Vida” de Neuquén.